No es verdad que el capital, una vez creado, lleve a ganancias futuras de riqueza eternamente en el futuro. Solo una adaptación constante, a través de los emprendedores, puede asegurar que el proceso de producción logrará el flujo de bienes de consumo en el periodo por venir.
Desde que ganó el Premio Nobel en "Ciencia Económica" en 2001, Joseph Stiglitz ha sido la banda de defensa de un solo hombre para el crecimiento del Estado.
La política de estabilidad de precios de la Fed, como en la década de 1920, puede atrapar a los economistas nuevamente sin darse cuenta del daño infligido por esta política.
Los Cleveland Browns llegan al draft de la NFL de este año con una tremenda ventaja de capital frente a otros equipos. Eso no basta para garantizar su éxito.
Tanto los hechos como la lógica parecen respaldar la opinión de que el ahorro invertido en herramientas de producción económica de propiedad privada equivale a un acto de caridad.
Si trabajar es el precio que pagamos por obtener lo que queremos, entonces el progreso económico significa disminuir este precio gracias al continuo crecimiento de la productividad.